Llamadas, zooms, mensajes de texto que van y vienen hasta bien entrada la madrugada. Esa es la vida de Leonardo Madcur, jefe de asesores del Ministerio de Economía, y de Luis Cubeddu, el jefe de la misión ante la Argentina del Fondo Monetario Internacional (FMI) en las últimas semanas. Esa dinámica frenética se mantuvo en estas horas sin todavía algunas definiciones clave a la vista. En principio, sí se llegó a una foto similar a la del 12 de septiembre pasado.
Entonces, el ministro de Economía, Sergio Massa, se había reunido en Washington con la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, y la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen. Los equipos técnicos no habían logrado llegar a un acuerdo aún y lo que se trabajó fue un comunicado de prensa para enmarcar el ritmo de las negociaciones. Una semana después se logró el staff level agreement con el Fondo. Esa es la esperanza oficial hoy.
En estas horas, en el Ministerio de Economía se negocia con intensidad, tensión y contrarreloj, sobre todo ahora que Massa es candidato y necesita blindar las elecciones de una corrida cambiaria. Pese a que el ministro y su viceministro, Gabriel Rubinstein, habían hablado de un acuerdo con el organismo “en las próximas horas”, todavía se trabaja con fricciones en un comunicado de prensa que enmarque una decisión ya tomada: se hará el pago de US$2700 millones hoy.
Irónicamente, no se usarán dólares, un bien escasísimo en el Banco Central (BCRA). La oposición estima que las reservas netas son negativas en US$2000 millones. Incluso, la entidad que dirige Miguel Pesce viene perdiendo, incluso yuanes.
Fuentes oficiales confirmaron que se utilizarán 1700 millones de DEG (Derechos Especiales de Giro; la moneda del Fondo) y que el resto se pagará en yuanes “de libre disponibilidad” aportados por el Banco Popular de China, y que serán devueltos al país oriental apenas el Fondo haga el desembolso de 3000 millones de DEG previstos por la demorada quinta revisión.
Massa logró ampliar el uso de yuanes en su viaje a China semanas atrás. Pese a la polémica con la oposición, en Economía afirman que puede comprar dólares con parte de ese swap (10.000 millones). Nunca se aclaró el costo de esa operación. El gobierno chino dejó incluso en claro que prefería que esas divisas se usen para el comercio exterior con ese país.
Acuerdo demorado
El cierre a nivel de staff se demorará todavía unos días más, confirmaron fuentes oficiales, y llegaría la semana que viene, dicen ahora, “con un acuerdo semestral”. Massa busca un adelanto de los desembolsos que debían hacerse entre junio y diciembre, unos US$10.600 de dólares. Además, se había hablado de un extra de US$1800 millones de 2024.
Para eso, incluso, había prometido un anticipo del pago de los vencimientos de la semana pasada como un “gesto” al directorio del organismo. No se pudo avanzar en ese camino y finalmente el bundle (la consolidación de pagos) será mañana. Si la Argentina no pagara entraría en una situación de arrears (atraso) con el organismo.
El comunicado -comentaron en el Ministerio de Economía- con la trayectoria que siguen las negociaciones se sigue trabajando y podría publicarse entre hoy y mañana. No está todavía confirmado, lo que demuestra lo complejas de las tratativas. En Tesoro de EE.UU. hay resistencias con la Argentina, que Massa busca traspasar a través de la Casa Blanca.
“Esta semana habrá grandes avances con el Fondo”, había dicho Rubinstein el lunes pasado, luego de un encuentro ampliado del equipo económico. Anteayer, en la conferencia anual de Camarco, Massa había anticipado un acuerdo con el Fondo en “las próximas horas”. Sin embargo, el acuerdo con el staff está todavía demorado. Y el desembolso de junio o los anticipos del año sólo llegarían cuando se haya alcanzado un acuerdo técnico con el staff y además luego una aprobación del directorio del FMI, que, por lo menos, tardaría en llegar unos 15 días más luego del staff level agreeement.
Entre las piedras en el camino de las negociaciones aparecen el monto y el uso de los desembolsos del Fondo. Economía había dejado entrever que ya tenía luz verde para usar parte de los adelantos que negocia para ampliar créditos presupuestarios en medio de la caída de ingresos por sequía que sufre el país. Implícitamente, significa que puede vender esos dólares en el mercado cambiario. Sin embargo, esas divisas deberían ser destinados al pago de la deuda. Los desembolsos del organismo, de hecho, están calzados con los vencimientos de deuda.
El temor del Fondo es que Massa los use indiscriminadamente en la campaña electoral, que ahora lo tiene como candidato a presidente del oficialismo. La posibilidad que barajaban en Economía era de adelantos de fondos en dos tramos: junio y septiembre. Sin embargo, el primer desembolso ya no llegaría este mes. Los dos tramos indican condicionalidades. Para destrabar el segundo, el Ministerio de Economía debería acatar los compromisos que dejará plasmados en el acuerdo.