La Aduana recibió este lunes 13 cachorros de perros labradores, golden retriever y pastor alemán, y la semana próxima llegarán otros 15, utilizados en acciones de control no invasivo de narcóticos y divisas, y conforman un binomio con sus guías, quienes los llevan a vivir a sus casas y los consideran parte de su familia.
En las próximas semanas, los canes recientemente incorporados permanecerán en el Centro de Adiestramiento Canino de la Dirección General de Aduanas (DGA), donde serán instruidos lúdicamente con ejercicios de destreza y exploración, para luego ser asignados a sus guías, una metodología pionera en América Latina, con quienes entablan un vínculo «muy especial» por ser compañeros durante años o incluso toda la vida.
Durante una visita de Télam a este centro de adiestramiento, ubicado en la localidad bonaerense de Boulogne, Débora Di Biase, una de las instructoras, manifestó la emoción del equipo por recibir una nueva camada de cachorros de unos 60 días que pronto se sumarán a las tareas aduaneras.
«Muchas veces se piensa que los perros sufren de maltrato o que se vuelven adictos, cuando ni siquiera están en contacto con las sustancias. Lejos se está de eso, es un entrenamiento en base al juego», sostuvo la instructora.