Un momento de máxima tensión se vivió durante el partido que Portugal y Uruguay juegan en Lusail por el Grupo H del Mundial de Qatar 2022.
Un fanático se metió al campo de juego con una bandera con los colores LGBT, algo que está expresamente prohibido en el país anfitrión.
Además, en la parte delantera de su camiseta se leía “Salvemos a Ucrania” y en la parte de atrás se leía “Respeto a las mujeres iraníes”.
El hombre fue retirado del estadio de inmediato por los guardias de seguridad.