A pesar de esto, está plagado de mitos o información errónea, como que es un esteroide anabólico o que permite desarrollar fácilmente músculos, sin la necesidad de ejercitarse. Aquí repasamos sus principales características y te contamos cuáles son sus verdaderos beneficios.
La creatina es una sustancia química que se forma en el cuerpo a partir de compuestos similares a los aminoácidos, los componentes básicos de las proteínas. Aproximadamente el 95% se encuentra en el músculo esquelético, aunque también está presente en células nerviosas.
Se produce de forma natural en el hígado, páncreas y riñones a partir de los aminoácidos arginina, glicina y metionina, aunque también se puede obtener a través de la dieta, principalmente por el consumo de carne roja, pollo, pescado, lácteos o huevos.
Cuando el cuerpo procesa la creatina esta se convierte fosfocreatina, se almacena en los músculos y aporta energía. Por este motivo, muchas personas la toman como suplemento para mejorar su rendimiento deportivo y aumentar la masa muscular.
De hecho, su uso está permitido por el Comité Olímpico Internacional, la Asociación Nacional de Atletismo Colegial (NCAA) y otras organizaciones afines.
Existen más de veinte formulaciones diferentes de creatina, como clorhidrato de creatina o creatil-l-leucina, sin embargo, solo el monohidrato de creatina, la forma que normalmente se encuentra en los suplementos comerciales, tiene evidencia sólida que respalda sus efectos, aseguró Eric Rawson, profesor de ciencias de la salud, la nutrición y el ejercicio en la Universidad Messiah en Pensilvania, en una publicación de The New York Times. Por este motivo, no se recomienda consumir otra forma del compuesto.
¿Cuáles son los efectos de la creatina?
Como señalamos, el principal beneficio asociado a la creatina son las mejoras en el rendimiento físico. En las últimas décadas se han realizado diferentes investigaciones al respecto. Por ejemplo, una reciente revisión de 35 estudios publicada en Nutrition halló que la suplementación con creatina, combinada con entrenamiento de resistencia, aumentó la masa corporal magra (el peso del cuerpo, menos la grasa) en más de dos libras en adultos, independientemente de la edad.