El gobernador, Osvaldo Jaldo y el jefe de Gabinete, Juan Manzur, asistieron al tradicional Tedeum en el marco del Día de la Independencia.
El gobernador, Osvaldo Jaldo y el jefe de Gabinete, Juan Manzur, junto con autoridades, nacionales, provinciales y municipales participan del Tedeum en la Catedral tucumana, en el marco de los festejos por el Día de la Independencia.
“Hoy celebramos un nuevo aniversario de la Independencia nacional declarada en esta benemérita ciudad de Tucumán el 9 de Julio de 1816. Lo primero que hicieron los congresales al día siguiente de declarar la Independencia fue ir a la Iglesia de San Francisco para dar gracias a Dios”, recordó al comienzo de la homilía Monseñor Carlos Sánchez.
“La palabra de Dios ilumina esta fiesta y nos invita a vivir en el amor, la libertad, la paz”, agregó el Obispo en el tradicional Tedeum.
Sánchez, en otro tramo de su homilía, aseguró que en la actualidad “hoy nuestra Patria en un pueblo hambriento, desconcertado, herido. Ha crecido la pobreza hay hambre de Justicia y dignidad. Hay hambre de paz social, de respeto a la Constitución, de una democracia autentica, de respeto a las instituciones. Hay hambre de dialogo, de encuentro y participación para superar divisiones y enfrentamientos. Hay hambre de verdad. Hay hambre de libertad y de una vida más segura, cordial, fraterna. Hay hambre de esperanza y de consuelo”.
Monseñor consideró clave “la confianza en Dios, él nunca nos abandona. Y nosotros conocemos a nuestro pueblo, es creyente y solidario. Otra claves es el compartir con entrega y generosidad. Cuando compartimos seguro que se multiplica. Para que no haya excluidos, para que no haya sobrantes. Si compartimos de verdad va a poder alcanzar para todos”.
El Obispo aseguró que “es necesario caminar juntos buscando la reconciliación. Salgamos de nosotros mismos y de nuestros propios intereses. Digamos sí a la cultura del encuentro y no a la cultura del enfrentamiento. Amemos y sirvamos a la Patria creciendo en fraternidad, promoviendo la amistas social. Es tarea de las dirigencias de todos los ámbitos, sin distinción, especial de las autoridades gubernamentales desde las decisiones de políticas públicas en favor de todos en especial de lo que más sufren. Asumamos el compromiso responsable de trabajar unidos por el bien común. Todos los ciudadanos”.
“Nuestros próceres nos han legado una Patria con sangre y sudor. con amor y sacrificio. Ahora la vemos desgarrada por la pobreza el endeudamiento y la falta de un proyecto de Nación. Queremos ser una Patria de hermanos. Queremos ser Nación”
“Cada sociedad, dice el papa Francisco, necesita asegurar que los valores se transmitan porque si esto no sucede se difunde el egoísmo, la violencia y la corrupción en sus diferentes formas”, amplió el religioso durante su homilía en el marco de un nuevo aniversario de la Independencia.
Sobre el final del Tedeum, Monseñor dijo: “volvamos nuestro corazón a Dios. Con una profunda autocrítica que superando las acusaciones mutuas y la búsqueda permanente de culpables nos permita mirar los errores individuales y colectivos y convertirlos, y comprometernos en la reconstrucción de la Patria desde la fraternidad”.